MUNDO

En Barcelona la Comunidad recuerda a Darling, un joven hondureño víctima de la violencia. Los Jóvenes por la Paz dicen “No a la indiferencia”

El martes 16 de septiembre, la Comunidad de Sant’Egidio de Barcelona se congregó en la plaza Antoni Campany, donde se halló el cuerpo de Darling Menjadi, un joven de tan solo 16 años que fue asesinado la semana pasada durante una pelea.

Fue un momento de oración y de consuelo al que asistieron sus padres, amigos de la escuela, ciudadanos y jóvenes del barrio; una respuesta al clima de indiferencia y de desatención que ha rodeado este trágico acontecimiento, y un momento de esperanza para construir una ciudad más solidaria y de paz. 

Tras escuchar la Palabra de Dios, al finalizar la oración  se depositaron flores frente a una fotografía del joven Darling en el lugar donde lo hirieron y donde fue auxiliado por un grupo de personas sin hogar que intentaron ayudarle y que pidieron auxilio.

Los Jóvenes por la Paz de Barcelona hicieron un llamamiento a la responsabilidad de todos para crear un clima de respeto y de convivencia pacífica. 

Llamamiento de los Jóvenes por la Paz

Esta tarde nos reunimos porque creemos que es muy importante no ser indiferente ni mirar hacia otro lado.
Es importante compartir el dolor e interrogarnos, pero también es importante no dejar de buscar con creatividad caminos alternativos para construir una ciudad más humana y pacífica. La tragedia que vivió Darling impacta en nuestras conciencias, sacude nuestro bienestar y nos llama a vivir una responsabilidad común. No podemos aceptar que esto ocurra como si fuera algo inevitable, o como una crónica que se suma a una serie de malas noticias.

No podemos acostumbrarnos a estas noticias. Nos sentimos responsables de la vida de todos nuestros hermanos: jóvenes o ancianos, blancos o de color, musulmanes o cristianos, ricos o pobres, nacidos en nuestro país o en cualquier otro país del mundo. La muerte de un hombre a manos de otro hombre siempre es una derrota para toda la humanidad. Proteger la vida y luchar contra la violencia y contra el racismo son una responsabilidad común.

A todo eso hay que añadir que Darling tenía 16 años. Tenía toda una vida por delante. La muerte de un joven hace que este acontecimiento sea aún más trágico.
No queremos ser indiferentes. No queremos simplemente quedarnos atónitos. Queremos despertarnos. Podemos seguir nuestro camino solo si no dejamos que la indiferencia se lleve otras vidas y el sueño de un mundo mejor de paz.

Estamos aquí porque no podíamos ser indiferentes y quedarnos en silencio. Estamos aquí para decir una vez más NO A LA VIOLENCIA, tenga la forma que tenga y venga de donde venga. Estamos aquí para reafirmar el valor de la vida de todo hombre y de toda mujer, y para que la muerte de Darling sea de verdad la última. Estamos aquí para tomar una decisión: no acostumbrarnos al mal y ser guardianes de nuestros hermanos.

¡Nunca más esta violencia! ¡Nunca más ninguna violencia! Nunca más.

Nosotros creemos en la integración, creemos en el diálogo, creemos en la cultura y en la solidaridad como vías para construir un mundo mejor y en paz. Lo decimos alto y claro. Lo repetimos: una ciudad de la convivencia y de la paz se construye integrando a todos, dialogando con personas diferentes, cultivando el interés por todo y sobre todo siendo solidario.

Guardemos esta esperanza que crece cultivando juntos estas semillas, para hacer que nuestra ciudad sea una ciudad de convivencia y de paz.
¡La construimos juntos!

Barcelona, 16 de septiembre de 2025